La radiofrecuencia específica de INDIBA (448 kHz) no daña las células y por ello no es necesario restaurar el estado del tejido.
Nuestra tecnología trabaja en profundidad y todas las células se benefician de la activación de los fibroblastos, el colágeno y la elastina. Como resultado, la piel se tensa y se suaviza.
Nuestros tratamientos son no-invasivos e indoloros y pueden repetirse durante toda la vida porque no presentan efectos secundarios.